lunes, 29 de abril de 2013

Paciencia


Leo que la definición de la paciencia es la actitud que lleva al ser humano a soportar contratiempos y dificultades para conseguir algún bien. Esto es lo que Rajoy nos pide, después de que su gobierno reconozca que esta legislatura está perdida en materia de empleo. Paciencia a dos millones de hogares sin ningún tipo de ingresos, paciencia a los jóvenes que son insultados por una ministra cuyos únicos empleos han sido los proporcionados por su partido.

Escucho al presidente de gobierno decir que está “muy contento y satisfecho con sus ministros”, en una prueba más de su distanciamiento de la realidad. Escucho permanentemente a Cospedal insultar y mentir a los ciudadanos. ¿Y aún así nos piden paciencia?

Podríamos tener paciencia si tuviéramos un camino marcado y al final de ese camino viéramos la luz. Pero no, se nos pide paciencia en un camino a ninguna parte, un camino que nos lleva a más recortes, a más miseria, a mayor desigualdad. Podrían pedir paciencia si no estuvieran deslegitimados para ello, pero aún recuerdo esa foto de Rajoy a las puertas de una oficina de empleo, bajo la que podíamos leer “Cuando gobierne bajará el paro”. También recuerdo un mitin el día 20 de mayo de 2011 en Ciudad Real, donde Cospedal comparaba las papeletas de voto del PP con contratos de trabajo.
En mi opinión, las previsiones del Gobierno tienen una doble intención, por un lado meternos miedo para continuar con sus recortes y hacer lo que quieran. Por otro lado, decir en 2015 que han mejorado las previsiones.
De un presidente de Gobierno se esperan soluciones. De este presidente no podemos esperar nada. Tenemos un presidente que se esconde, y estamos padeciendo a un partido de Gobierno corrupto y de una ineficacia pasmosa. ¿Y aún así nos piden paciencia?

No podemos tener paciencia mientras vemos como este Gobierno universaliza la miseria.

Estos días he leído que si España no sufre un estallido social, es por la economía sumergida. Es porque muchas personas aguantan con la ayuda de la red familiar. Pero, ¿cuánto más podrán aguantar? Las últimas medidas adoptadas por el Gobierno solo vienen a exprimir aún más a la ya casi inexistente clase media. Cada vez somos más pobres, cada vez tenemos más motivos para salir a la calle y protestar. Necesitamos soluciones realistas y valientes que, desde luego, nuestros gobiernos no están capacitados para darnos.

La austeridad excesiva está haciendo caer el consumo. Las subidas de impuestos nos colocan en situaciones complicadas todos los meses. Alemania manda y Rajoy como alumno aventajado asume todo, sin levantar siquiera la voz. No nos puede pedir paciencia. Nosotros sí necesitamos levantar la voz. La paciencia se perdió y no nos valen “herencias recibidas”. Ustedes gobiernan y son los que tienen que dar soluciones, pero las que proponen no valen.

Salgan a la calle, hablen con las personas, escuchen lo que tienen que decirles. Mírenles a los ojos y no mientan ni insulten. Pero no nos pidan paciencia, que de eso ya no tenemos.

viernes, 12 de abril de 2013

Comenzando mi andadura.


Todos los días, por mi cabeza pasan cientos de ideas, hablo con mucha gente, me expresan sus inquietudes y preocupaciones, por eso me he animado a crear un blog, con un humilde objetivo, expresar en público mis pensamientos.

Creo en la política como un servicio público, pensando que desde la política se pueden cambiar las cosas, puede que muchos piensen que soy un idealista, pero de verdad creo en esto.
Llevo muchos años militando en un partido político (PSOE), no siempre las cosas que hicimos me parecieron bien, pero también creo en la rectificación y en que la única forma de cambiar las cosas, es estando dentro y aportando ideas, pensamientos y trabajo, mucho trabajo.

Los ciudadanos son lo primero y desde luego en un momento como el actual, mas.

Me despierto todos los días con noticias que me horrorizan, que me enfadan o me desesperan, problemas a los que no se da solución, de los que se habla pero sobre los que no se actúa. Las movilizaciones en la calle se multiplican y algunas veces escucho el famoso “no servirá de nada” pues a esas personas que así opinan, yo les digo, aquí en mi provincia el gobierno regional quería cerrar seis puntos de atención continuada (PAC) dejar a cientos de vecinos sin urgencias por las noches y gracias a la gente (vecinos), a los alcaldes (sin sueldo) es decir, a la presión ciudadana, estos centros están abiertos. La presión ciudadana no tiene que cesar, tenemos que protestar, nuestra voz se tiene que oír, tenemos que estar en la calle o en las administraciones, expresar con fuerza lo que no nos gusta o lo con lo que no estamos de acuerdo, somos muchos y desde luego, quedándonos en casa, no solucionamos nada.

El próximo 9 de mayo, volvemos a tener una oportunidad de hacernos oír, profesores, padres y alumnos convocan una huelga general de educación, contra el recorte de 5.000 millones y contra una ley injusta que no contenta a nadie y no resuelve los problemas. Por eso te pido que participes. Somos más y juntos hacemos mas fuerza.